Desde un punto de vista social, un animal de compañía nos aporta una gran variedad de beneficios, según sea este animal y dependiendo de cuál sea nuestro día a día.
Un animales de los que entendemos como «animal de compañía», es un ser vivo que dependerá única y exclusivamente de sus cuidadores. Esta necesidad supone que el propietario tenga una obligación prácticamente diaria de alimentarlo, limpiarlo, educarlo y de alguna manera protegerlo tanto de peligros externos (accidentes), como enfermedades. Esta «obligación» genera un sentimiento de responsabilidad y unas rutinas que darán un bienestar a los propietarios al ver que todas aquellas acciones que hacen para su mascota se traducen en felicidad, juegos y cariño que cualquier animal puede dar a su propietario.
Además, el mundo de la mascota genera una serie de relaciones interpersonales entre los propietarios que nos hacen aumentar nuestro círculo de amistades, contactos y nuestra vida social.
Por otra parte, se ha demostrado que los niños que crecen rodeados de animales desarrollan una sensibilidad y unos valores diferentes a los que no, y que les permiten desarrollar muchas cualidades en la vida adulta.
A grandes rasgos, y generalizando, podríamos definir varias maneras de vivir:
Esto dependerá en gran medida de la especie que escogemos. En el Hospital Veterinario Garbí, donde hay un equipo de personal especializado, explicamos muy detenidamente cuáles serán los cuidados que debe tener con su mascota, para que esté sana y puedan disfrutar el uno del otro durante mucho tiempo. También recomendamos una serie de actividades o deportes para hacer con la mascota que se adapte al estilo de vida que nos explique el propietario.
A grandes rasgos, una mascota se debe alimentar cada día, se deben sociabilidad con otros animales de la misma especie, se debe educar para que ellos se adapten a nuestro modo de vida, deben pasar unas revisiones médicas sobre todo para evitar enfermedades y, es muy importante, que se identifiquen con microchip y se censo.
Desde mi punto de vista, la cría incontrolada por parte de particulares no debería lucrar y, por tanto, los lugares donde se deberían adquirir las mascotas quedarían restringidas a las anteriores.
Una vez tenemos nuestra mascota en casa, nos hemos asesorado, conocemos la raza y hemos pasado tiempo con nuestro animal. Si detectamos algo que sale del comportamiento habitual de él, ¿qué debemos hacer?
Lo que nosotros como centro especializado recomendamos, es que ante cualquier cosa que salga de lo habitual, consultar con un veterinario o un profesional de la salud animal. Ya sea porque el animal vomita, tiene una herida o de repente ha cambiado su comportamiento. Ante la duda, siempre nos puede llamar y los profesionales de Garbí le informarán sobre qué hacer o, por el contrario, es necesario que lo visite un veterinario.
Finalmente, es ley de vida, que así como adquirimos una mascota, con el paso del tiempo, este animal crecerá, envejecerá y finalmente llegará un día en el que le tendremos que decir adiós. Qué es lo que tenemos que hacer en estos momentos?
Cuando un propietario me pregunta, Ares, y en su momento? Siempre contesto lo mismo: Estad tranquilos, el día que sea el momento de ponerlo a dormir lo verá tan claro, que no tendrá ninguna duda. En ese instante, llamadme, hablaremos y juntos tomaremos la decisión. Entonces una vez todos nos hayamos despedido de aquel amigo, el Hospital se hace cargo de todo dado que los enterramientos de mascotas no están permitidos en este país.